sábado, 11 de junio de 2022

Hay rosas que tienen más vidas que un gato

En botánica, en biología, la flor es el órgano encargado de la perpetuación de la especie; debe ser garante de la reproducción, dispersión, preservación y variabilidad de la misma para que su descendencia tenga más posibilidades de adaptarse al medio -siempre cambiante. Es mucha responsabilidad.

El hombre fastidioso (sensu lato –la humanidad, pues), ha modificado muchas cosas a su conveniencia. Eso se vale también. Y entonces encontramos que los mejores cítricos son los que tienen menos semillas y las mejores flores son las que producen menos polen y más pétalos. No hay reproducción sexual ahí. Y es que no todo tiene que ser sexo en la vida (lo cual es válido para muchos otros casos).

¿Cuánto amor puede transmitir una rosa? ¿Cuánta vida puede tener? ¡No la cortes!, dicen algunos –pero sí, bueno, ellas están acostumbradas a embellecer el entorno (ser “ornamental” es un uso validado y registrado); son bellas desde su tierra en un jardín, en un jarrón en la mesa, en un ramo para el perdón, en una despedida, en un intento de amar, ¡en una clase de botánica! Pocas de ellas tienen función reproductiva; la mayoría ‘solo’ propagan amor: amor inocente, amor fraternal, amor filial, amor sexual ¡una rosa siempre será amorosa!

Esta rosa en particular ha tenido una larga vida (y este cuento vale para las otras dos que estuvieron involucradas). Cualquiera diría que “murió” el miércoles o jueves cuando la cortaron para hacer los arreglos florales que adornarían la imposición de medallas de los graduandos en Medicina. Nada más lejos de la realidad. Es sábado por la tarde y aún tengo un par de planes para ella.

Me gustan mucho las rosas. Más las blancas, por lo que significaron para mí las primeras que me regalaron en la vida, “antier”, en 1984. Las rojas. ¡Ay! ¡las rosas rojas! Cuánta carga romántica tienen que llevar encima, las pobres. Esas me llevan a 1988 y me dan una nostalgia horrible. Delante de un caballero guapísimo de ojos negrísimos, me esperó una rosa roja al final de cada concierto, en todos los conciertos, solo en 1988. Nunca más. Y aún lo sonrío y lo suspiro. No hay nada que hacer al respecto.

Pero realmente no importa el color, cuando de amor se trata y cuando no importa cual sea el tipo de amor del que se trate. Una rosa color salmón, casi blanca, procedente de un alma pura y loca, un amiguito honesto y consecuente, me regaló la primera sonrisa que adornó todas las fotos que me tomaron después.  

Los pétalos de otra, en lo que representó un gesto bellísimo de nuestro más gentil caballero del Orfeón, sirvieron para bautizar a una compañerita ¡que nunca había cantado en un Grado! #MásSonrisas #RosaAmorosa

Y escribiendo esto, no sé si me voy a atrever a contar lo que pasó con “la” rosa…

Pero la anterior… quise que produjera más sonrisas ¡Y entonces se la obsequié a otra Rosa! En lo que fue un adorable intercambio con quien siempre tiene amor y donas para compartir. Todo el mundo la conoce, todo el mundo la quiere ¡y ella dice eso mismo de mí! #MásSonrisas #RosaAmorosa  

La otra rosa, mi rosa. 

Apareció después de haber estado escondida más de tres horas, a la sombra de aquella primera rosa color salmón. Esperó el momento apropiado para abalanzarse sobre mí. Aplastante. Hermosa. Sencilla. Serena. Y yo fui torpe y alborotada. Pero esta tiene otros colores. Esta tiene otros aromas ¡su aroma!. Esta es diferente. Esta se va a quedar en su pedacito de historia indeleble, aunque aún no tenga ninguna historia.   




Quien quiera saber qué más pasó con la rosa, puede asomarse a ver el vídeo que hice de su disección para mis estudiantes 

¡Larga vida a la rosa amorosa!





6 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Tan bonita! Gracias! Aún no me atrevo a usar ese "título" jeje pero viene por ahí ♡

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  2. Espero, entonces tu atrevimiento, aunque sea en relato "brevis".
    Inevitable leerte y no recordar el aforismo de Gertrude Stein que luego popularizó Mecano: "una Rosa es una rosa es una rosa es una rosa".
    Un gustazo leerte, te visitaré por acá.
    ¡Qué buena recomendación me hicieron!

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    1. ¡Caramba! ¡Gracias! Me disculpo por no haber respondido antes pues esta cosa la mayoría de las veces no avisa. Sigo escribiendo. Gracias por acompañarme ♡

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